El segundo especial de televisión de Barbra Streisand, se emitió en 1966 justo después de que el cantante y compositor hubiera completado una exitosa serie de éxito de Broadway 'Funny Girl'. Streisand canta rodeado de animales en una secuencia de sueños circenses y recorre el Museo de Arte de Filadelfia en una pieza de ocho minutos de mal humor. Filmada en un color espectacular, esta pieza complementaria de su primer especial es una para las edades. Los colores vibrantes se convierten en una metáfora de la imaginación, la inventiva, la fantasía y el brillo absoluto.