El jugador
Alejandro Reynoso, un apostador retirado que trabaja para un acaudalado empresario de la carne, viaja a Mar del Plata donde debe entregarle una considerable suma de dinero a los nietos de su jefe. Paulina, joven y bella, reniega del mandato impuesto por su abuelo de administrar la empresa familiar, y gracias a la fascinación que ejerce sobre Alejandro, lo convence para que juegue por ella en la ruleta. Sergio, hermano de Paulina, tampoco aspira a seguir con el negocio de la familia y no duda en engañar a Alejandro para utilizar el dinero de la empresa en sus propios asuntos. Muy pronto el azar y sus desenlaces irán complicando las relaciones en esta tensa trama, en la cual todos se necesitan y se usan mutuamente. La ruina los espera como el resultado de decisiones equivocadas y otros desaciertos. El implacable azar, sin ley ni voluntad, les depara tanto la fugaz e inconstante fortuna, como la ruina