En un pequeño pueblo, Will un joven padre lleva de cacería a su pequeño hijo, luego de un rato notan que muy cerca de ellos están dos hombres teniendo una fuerte discusión por un dinero que se han robado de un banco, cuando los criminales notan que tienen compañía piensan en deshacerse de ellos disparando, pero para su desgracia Will tenía su arma de caza en mano y en un acto de defensa propia les dispara.
Mientras uno de los hombres huye, el otro quien fue impactado por la bala queda tendido en el suelo inconsciente. Conmocionado por lo sucedido Will solo piensa en llevarlo a casa para de alguna manera salvar su vida, pero no contaba con que el malhechor tomará represalia contra él raptando a su hijo con el fin de recobrar una llave que abre la puerta que contiene el botín robado.
El secuestrador consigue comunicarse con Will advirtiéndole que no debe llamar a la policía, para ese entonces el Sheriff del pueblo (Bruce Willis) se encuentra al tanto de una parte de la historia, y por su cuenta realiza una investigación en la que determina que Will está implicado en el robo y asesinato del hombre, sin sospechar que solo intenta salvar la vida de su hijo.