Si permaneces solo en casa y alguien llama a tu puerta será mejor no abrir, pues podría haber consecuencias inimaginables, lo mismo diría Evan (Keanu Reeves) un hombre de mediana edad, casado y con hijos. Se ha quedado en casa por trabajo, mientras su familia se va de paseo durante el fin de semana. En medio de una lluvia torrencial a mitad de la noche, dos hermosas chicas tocan su puerta, han quedado varadas y él se ofrece a ayudarles. Estas chicas en agradecimiento inician un juego sexual en el que después de pasarla bien, deciden tomar venganza por haber sido infiel a su esposa, hasta conseguir atormentarlo y arrepentirse de sus actos.