Mini (Nikki Reed) es una joven y sexy rebelde, caprichosa y manipuladora, pero desesperada por escapar de su poco cariñosa madre (Carrie-Anne Moss), demasiado aficionada a las fiestas y la bebida. Simplemente por diversión, Mini decide trabajar como prostituta, así que se apunta a una agencia de acompañantes de la cual su padrastro (Alec Baldwin), un hombre muy rico, es cliente.